No creo en dietas, pero si creo en pequeñas porciones.
Es muy reconfortante invitar a las amigas a degustar un rico pedazo de pastel hecho por nosotras, o unas ricas galletitas para acompañar una humeante tazita de café, si es un buen latte con una espolvoreadita de canela, mucho mejor.
De vez en cuando hay que darse un pequeño gustito para endulzar el paladar.
